Fracasé en los primeros días de mi propósito de
escribir y entrenar diario. Y haya sido como haya sido, lo que diga son puros pretextos (en mi defensa puedo
decir que dos de esos días no llegué a mi casa).
Bueno, pues fueron días interesantes y este es el resumen:
Empezaré desde el jueves porque estuvo muuuuuy rico y
coqueto porque fuimos a The Cheesecake Factory y tuve un momento estético con
un Ultimate Red Velvet Cake Cheesecake y esta canción:
You can't always get what you want...
You can't always get what you want... (para ejecutar en la app)
You can't always get what you want...
You can't always get what you want... (para ejecutar en la app)
Después, me dio sugar rush y tuvieron que llevarme a tirar
unos pases para que se me bajara toda la azúcar que me había comido en esa deliciosidad (estaba realmente acelerada,
hasta me dio miedo). También pasamos a comprarle su traje de astronauta a Tokyo y me enamoré...
Viernes: aprendí a hacer frijoles con longaniza en olla exprés.
Ese día no hubo entrenamiento.
El sábado fui por primera vez en mi vida a las trajineras de
Xochimilco. En la mañana de ese día,
fuimos a un partido de varonil contra femenil y me probé como corredora, safety
y ala. Atrapé todos los pases que me pasaron (bueno, se me fueron dos). Después
fuimos a la Comercial y Rubén y yo nos tomamos unas fotos instantáneas en las
cabinas coquetas, hacía mucho tiempo que no nos metíamos a ninguna. Las últimas
que vimos estaban en el metro Tacubaya y las quitaron de la noche a la mañana.
Recuerdo como esas maquinitas eran la onda. Nostalgia.
Hoy domingo, pasé tiempo de chicas estereotipadas:
comprando, tomando postres y bebidas frías, hablando de cosas y riéndonos de
otras más, con la gran diferencia que todo fue en el mercado de mi casa. Así es, hoy Mey me
enseñó a comprar ropa de paca y me volví loca. Todo es tan barato y hay cosas
muy bonitas, aunque llegamos tarde porque según las enseñanzas de mi sensei
Mey, eso de ir a comprar ropa al mercado es temprano porque hay más ropa y
cosas bonitas. En fin, fue muy, muy, muy…
Mey me compró un esquimo de chocolate y me gustó mucho, y como
todo tenía que ser ad hoc, me lo sirvieron en una bolsa de plástico con
popote. Realmente es increíble todo lo que te puedes comprar ¡con tan solo 235
pesos! 1 vestido (que parece de mesera de cafetería de Nueva York),
1 sudadera, 1 pants (ya necesitaba uno) y 7 blusas. También me compré
calcetitas en mi puesto de confianza porque las que tengo ya me aburrieron. ¿A
poco no está genial? Obvio, Mey me enseñó cómo y qué tengo que checar cuando elija
algo y en dónde comprar.
También, me pegaron en mi cabecita y me duele mucho :(
¿Ya les dije qué buena es la canción de Run de Snow Patrol?
Me recuerda las aspiraciones que tenía cuando llegué a la Ciudad.
Esto es un mini resumen de todo lo que hice desde el jueves.
Tengo planeado subir dos o más post los
siguientes días para justificar los días que no publiqué y, uno de esos post
serán recetas de lo que he aprendido a cocinar con mi madre. Sí, estoy tratando
de pasar más tiempo con ella porque cuando llegue el bebé, no va a tener tiempo
para enseñarme sus recetas de cocina. Creo
que va a ser niña. Soñé con ella, tenia rizos
y las mejillas rosas. No tenía manos ni piernas, solo la columna y la
cabeza, porque en mi sueño, el desarrollo embrionario concluía meses después de
haber nacido.
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