sábado, 28 de febrero de 2015

Depresión de Febrero

Es super curioso cómo de un día para otro mi estado de animo cambia radicalmente.

Pero si lo analizamos, en realidad lo que hoy lloré fue la acumulación de todos los problemas de las semanas pasadas. Ahora sí, nada va bien.

Por qué demonios tenemos que ser dependientes de otras personas, necesitamos a como de lugar la aprobación de todos para sentirnos realizados, sentir que podemos encajar en esta sociedad, que podemos ser parte de algo y que si morimos, habremos marcado la vida de unas cuantas personas (entre más, mejor), Me siento tan terrible sabiendo estas cosas y que aun así, no puedo ser consiente de ellas.

Me deprimo cuando no puedo ser cool.

Tengo tantas oportunidades de brillar y nunca las aprovecho, hasta parecería que me saboteo. Tengo que pensar en qué es lo que hago para no dejarme hacer nada completamente bien. Han sido muy pocas las veces en las que me siento satisfecha con los resultados que tengo y todas las otras veces que lo hago mal, pongo pretextos y nunca quiero ser consiente (en todo el sentido de la palabra) de lo que estoy haciendo mal y por lo mismo, lo vuelvo a repetir.

Me ha llovido sobre mojado, mi mamá con sus pendejadas de niña de secundaria (hasta me da pena escribir lo que hizo), en la universidad está el viejito que se carga de poder con nuestro temor y micología que no sé bien qué onda. Mis tareas, mis inasistencias, mi miedo de no aprender nada, mi incertidumbre al no saber si estoy en la carrera correcta. Todo un caos en la universidad. En la corredera ni siquiera he entrenado porque o es eso o es el tocho (mi pretexto), y el tocho con sus mamadas de superioridad y temor a que alguien les quite su lugar, con sus miedos y sus cambios de posición y mal coaching. Un negocio familiar al fin de cuentas. Mi novio, con un pasado pesado que siempre aparece en el momento menos oportuno, y más inseguridad de mi parte al saber que su pasado era mejor que yo y que no hay nada que yo pueda ofrecer porque ahorita nada me sale bien. Y aveces piensa que solo con decir una frase "mágica", todo se solucionará y caeré rendida a sus pies. Ojala todos supieran que el amor no es suficiente, hasta podría decir que el amor no es nada si no sabes definirlo. Obvio, cada quien lo define como quiera pero si lo defines como sólo un sentimiento, entonces no vale nada. Nada.

Tampoco me voy a clavar en eso porque ya no tengo más que decir,

Sólo digo, y a pesar de todo eso ¿quieren que siga haciendo las cosas bien? (mi pretexto)

Febrero, siempre eres un culero conmigo. Ya suéltame, ¿no?